Winona Ryder, la actriz que renace de las cenizas

 

La actriz se había convertido en una de las más cotizadas en los ‘90, pero un escándalo en una tienda de ropa la marginó de Hollywood. Casi 15 años después, volvió a relucir en la tira juvenil de Netflix.

Winona Ryder se transformó en una de las actrices más cotizadas luego de revitalizar su carrera gracias a su rol en la exitosa serie juvenil Stranger Things.

La intérprete, que había visto cómo su ascenso se detenía después de un robo producido en una tienda de ropa de Los Ángeles, recuperó la confianza y el brillo tras recibir el llamado de Netflix y volvió a recibir todos los flashes. En el medio de su resurgir, cumple 51 años.

Su prolífica trayectoria inició de la mano de Lucas (1986), un largometraje que coprotagonizó junto a Charlie Sheen. De todas formas, la cinta que la catapultó al estrellato fue Beetlejuice (1988), dirigida por Tim Burton y que tuvo como actor principal a Michael Keaton. Su talento también relució en El joven manos de tijera (1990); durante el rodaje de aquel film, comenzaría su relación con Johnny Depp, uno de los grandes amores de su vida.

Posteriormente, la carrera de Ryder continuaría yendo en ascenso: por sus papeles en La edad de la inocencia (1993) y Mujercitas (1994) fue ternada al Oscar por Mejor actriz de reparto y Mejor actriz, respectivamente; además, conquistó un Globo de Oro y se erigía como una de las más cotizadas de la década del ‘90. Sin embargo, un acontecimiento inesperado generó que su avance quedara trunco.

El 12 de diciembre de 2001, ya catalogada como una superestrella, traspasó las puertas de la tienda de ropa Saks Fifth Avenue, de Beverly Hills, cuando fue interceptada por los guardias de seguridad del lugar. La intérprete, que había pagado algunas de las prendas, se había apropiado varios pares de medias, un cardigan, unas remeras y una cartera por valor de 5.400 dólares. La actriz fue detenida de inmediato.

En un principio, habían sido levantados varios cargos contra ella: robo, tenencia de drogas y fraude. Además, fue condenada a tres años de libertad condicional y a 480 horas de servicio comunitario. El juez, de todos modos, fijó una fianza de 20.000 dólares que fue ejecutada sin inconvenientes, pero todos los ojos de la prensa se habían posado sobre la estrella de Hollywood.

Si bien pocas veces mencionó el hecho, aseguró que aquel hurto le sirvió para reflexionar: “La mayoría de la gente cree que todo se descalabró desde ese momento, pero las cosas no venían bien desde hacía algunos años. Necesitaba parar, y descubrí que había vida detrás de las cámaras”. Incluso, los medios se habían dedicado a cubrir su problemática con las adicciones, que involucraba tranquilizantes y analgésicos.

Poco más de una década después, y prácticamente sin recorrido en el séptimo arte -tuvo algunas participaciones importantes en El dilema (2011) y Experimenter (2015)-, los hermanos Duffer depositaron su confianza sobre ella. Stranger Things (2016) apareció como un bálsamo para la actriz, que es una de las protagonistas estelares de la serie que es furor en Netflix.

A lo largo de las cuatro temporadas, Winona Ryder caracterizó a Joyce Byers, la madre de Will y Jonathan, que fue clave en más de una ocasión para resolver los misterios que se suscitaron en el Upside Down; la producción de la plataforma de streaming tiene previsto lanzar el final en 2024. Mientras tanto, Ryder volvió a estar en boca de todos: esta vez, su brillo en el set superó los escándalos, que parecen haber quedado atrás.

 

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